
por Rebeca Ruiz
El Ayuntamiento de Jaca, a través de la Oficina de Fomento, ha puesto en marcha una campaña que tiene como objetivo el dar a conocer el potencial industrial de la ciudad. Así, se ha realizado un análisis del suelo industrial disponible en estos momentos, a partir del que se pretende impulsar el asentamiento de empresas en la zona y dar un empuje a la actividad industrial. Actualmente, Jaca tiene a disposición industrial un total de 61,4 hectáreas de suelo distribuido entre sus seis polígonos: Campancián, Charlé, Rescanato, Llano de la Victoria, Estación y su apuesta estrella, Martillué.
En estos momentos, la Oficina de Fomento de Jaca ya ha presentado un primer dossier a la Mesa de Desarrollo y se han comenzado a dar los primeros pasos en la Comisión de Turismo y Desarrollo Económico. A partir de aquí, durante las próximas semanas, se iniciarán los contactos con los propietarios de los polígonos y los titulares de las distintas actividades, para, posteriormente, presentarlo a los agentes sociales –como asociaciones empresariales-. La intención es realizar un Estudio de Demanda que recoja las posibilidades reales de promoción del suelo industrial, para saber por dónde debe comenzar a implantarse este plan estratégico que tiene como finalidad última el desarrollo económico y la promoción del empleo en la zona.

Según los objetivos marcados por la Oficina de Fomento con este plan, la ciudad pretende “ampliar su oferta industrial desde el punto de vista de la ecología y la sostenibilidad”, basándose en su situación estratégica cercana a la frontera con Francia y como punto de partida hacia toda Europa. “Hasta ahora, Jaca se ha distinguido por ser un punto señalado de interés turístico, deportivo y cultural, pero ha llegado la hora de apostar por una industria responsable por el medio ambiente, que pueda crecer y desarrollarse a todos los niveles”, se defiende desde la Oficina de Fomento en la ponencia desarrollada como punto de partida para la campaña de promoción. La Oficina de Fomento del Ayuntamiento de Jaca y el Instituto Aragonés de Fomento del Gobierno de Aragón, con quien se está trabajando conjuntamente, lideran esta iniciativa.
En este sentido, Javier Blasco, portavoz de Chunta Aragonesista, asegura que “es un paso adelante”. Fue CHA quien propuso que se realizara esta promoción de una alternativa económica industrial sostenible en el marco del Plan de Empleo Local. Blasco considera que los pasos que están dando van por el buen camino, pero advierte que será necesario “dotar de más personal a la Oficina de Fomento” si se pretende que el plan estratégico para vender Jaca como punto industrial resulte efectivo. Por eso, coincide también en la necesidad de realizar un Estudio de Demanda, que es en el punto en que se encuentra actualmente el proceso, “para coordinar esfuerzos y ver las posibilidades reales” de comercialización del suelo y poder ofrecer las bondades del territorio a las empresas que puedan estar interesadas en implantarse en Jaca. Estas empresas, ha defendido siempre Chunta Aragonsista, deben ser “no contaminantes, como las de nuevas tecnologías, energías renovables y agroalimentarias”. Tres sectores fundamentales para conseguir ese desarrollo industrial sostenible que se plantea en el proyecto.
POLÍGONOS INDUSTRIALES
El dossier recoge la situación actual de la superficie industrial disponible en Jaca, especificada por zonas. Campancián se extiende a lo largo de seis hectáreas y tiene el uso comercial agotado, ya que en él se encuentra el Centro Comercial Carrefour, de 16.000 metros cuadrados. Sin embargo, aún cuenta con disponibilidad de parcelas para uso logístico y no contaminante, con una dimensión media de 4.500 metros cuadrados. En cuanto al Llano de la Victoria, cuenta con disponibilidad en sus 9 hectáreas, aunque gran parte está ya ocupado. Permite la instalación de empresas en parcelas de unos 4.000 metros cuadrados, totalmente edificables, y posibilita compaginar el uso comercial e industrial por su cercanía a la ciudad.

Para empresas más pequeñas (en torno a 1.000 metros), en Rescanato, en la N330 y con buena comunicación a la A23, todavía queda espacio con edificabilidad total y zona de aparcamiento en parte de sus 15 hectáreas. También está Charlé, en la carretera de Francia, antes de Castiello. Aunque está completo, la variabilidad de empresas en este polígono puede dar lugar a nuevos espacios disponibles en sus 5.000 metros cuadrados de extensión. Y no hay que olvidar la zona industrial de la Estación. Es un polígono a extinguir porque su calificación cambiará al encontrarse en los planes de desarrollo residencial de la ciudad. Sin embargo, de momento hay posibilidad de alquilar temporalmente las naves, teniendo en cuenta el carácter temporal de esta dotación.
LA GRAN APUESTA
Martillué, en vía de desarrollo, es la gran apuesta de Jaca, con cerca de 40 hectáreas disponibles y pensado para convertirse en un referente logístico. Cuenta con un acceso privilegiado a la N330 y a la A21, y está incluido en los planes de desarrollo ferroviario y en los proyectos de reapertura del Canfranc como punto estratégico en la apertura hacia Europa. Por eso, está dotado con apeadero propio y circuito interior de vías, que facilita la manipulación de mercancías. Es un polígono ideado para empresas logísticas con proyección nacional o internacional, o empresas del sector forestal de gran capacidad y sector agro-alimentario que necesiten superficies de gran formato. La parcelación media prevista es de 17.000 metros cuadrados modificables en función de los requerimientos y necesidades de las empresas interesadas.
Por otra parte, y a expensas de las futuras negociaciones con otras administraciones y la coordinación con el Gobierno de Aragón para impulsar el desarrollo industrial de Jaca, así como la presencia en ferias especializadas y foros del sector, la promoción del suelo industrial de Jaca y de sus más de 61 hectáreas disponibles ya ha comenzado. El potencial de la ciudad ya aparece recogido en la primera edición de la Guía del Suelo Industrial que acaba de ver la luz, una publicación de Heraldo de Aragón, con una distribución de 60.000 ejemplares que ha llegado a una audiencia de dos millones de destinatarios. Un gran paso para comenzar a vender el potencial industrial de Jaca de una forma sostenible, como modelo de progreso compatible con la economía turística que siempre ha caracterizado a la zona.
