Un perro sufre graves lesiones tras ingerir una salchicha con una aguja en la zona de suelta de Jaca

Max es un perro que ha estado a punto de morir en Jaca tras ingerir un trozo de salchicha con una aguja dentro que alguien dejó en la zona de suelta controlada de La Cantera. Los usuarios de este lugar y que suelen pasear a sus animales por los glacis del Castillo de San Pedro han denunciado este hecho, para que otras personas estén alerta y extremen precauciones y no tengan que lamentar mayores consecuencias.

Salchichas con agujas en la zona de suelta de perros

Tras recorrer la zona de suelta de La Cantera y el entorno de la Ciudadela de Jaca, el dueño de Max lo llevó al veterinario al ver que vomitaba con sangre y descubrirle un bulto en el cuello. Al explorarle, se percataron que tenía una aguja de siete centímetros alojada en el esófago cervical, justo al lado de la garganta.

Pudieron extraérsela, pero le había dañado el esófago. Por suerte, en esta ocasión, no era demasiado tarde y Max ha podido salvarse. Ahora se recupera con terapia antibiótica y antiinflamatoria, mientras los usuarios de estas zonas advierten del peligro que corren sus perros porque «algún gracioso está echando salchichas con agujas», con el claro objetivo de causar el mayor daño posible.

Max se recupera de las graves lesiones que sufrió tras ingerir una salchicha con una aguja en la zona de suelta controlada de Jaca.
Max se recupera de las graves lesiones que sufrió tras ingerir una salchicha con una aguja en la zona de suelta controlada de Jaca.

No es la primera vez que aparecen salchichas con agujas en las zonas de suelta

No es la primera vez que sucede algo similar en Jaca. Hace unos años, la Asociación Protectora de Animales y Plantas Pirineos hacía público el caso de Truco. El perro, también de Jaca, había ingerido un trozo de carne que alguien había dejado expresamente, con una aguja dentro, en una zona de suelta controlada.

Aunque, afortunadamente, no es algo frecuente en la ciudad, tampoco es la primera vez que sucede en Jaca este tipo de comportamientos delictivos, que a punto han estado de costarle la vida a más de un perro. Hay que recordar que se trata de un delito de maltrato animal. Conlleva pena de cárcel.

El Código Penal, en su artículo 337, recoge penas que van desde los tres meses y un día hasta los 18 meses de prisión para los autores de este tipo de delitos.

Por Rebeca Ruiz

Un perro sufre graves lesiones tras ingerir una salchicha con una aguja en la zona de suelta de Jaca

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