Entre el 14 y el 16 de junio, la Feria de Brujas, Mitos y Leyendas se propone recuperar parte de la historia del Valle de Tena, que se trasladará seis siglos atrás, informa la Diputación Provincial de Huesca, donde hoy se presentaba el evento, en una nota de prensa. Por la tradición oral han llegado nombres de mujeres como Dominica la Coja, de Pozán; la tía Casca, de Trasmoz; Catalina García, de Peñarroya de Tastavins; o Guirandana de Lay, de Villanúa: fueron algunas de las aragonesas acusadas de brujería y ajusticiadas entre el siglo XV y mitad del XVII por ser consideradas diferentes. Estos sucesos serán los que marcarán las visitas guiadas entre un nutrido programa de actividades.

Las brujas protagonizan los actos en Sallent de Gállego
La feria invita a vivir multitud de actos escénicos y culturales en las calles de Sallent de Gállego que exploran las leyendas altoaragonesas en su vertiente histórica, pero con un renovado carácter divertido y tenebroso de cara al público más joven. Arranca el viernes, a partir de las 17.00 horas, con la apertura del Mercado Mágico de Artesanía con productos de Aragón, Navarra y Cataluña y la animación de calle a cargo del grupo Las Brujas Eventos.
La Feria de las Brujas se vuelca en el ámbito teatral
La principal apuesta de este año “pasa por volcarse en el ámbito teatral con propuestas que son todas gratuitas”, ha detallado Lucía Guillén, concejala del Ayuntamiento que promueve esta feria, que ha estado acompañada por el diputado provincial Luis Estaún, quien ha apuntado a “la nueva mirada que se da a unos hechos pasados” para documentar y escenificar relatos orales. Al presentar esta nueva edición en la DPH, Estaún se ha referido al grupo de colaboradores y expertos creado en torno a este evento del que ha destacado también su papel en el turismo “porque consigue ser un dinamizador económico del valle y ampliar la temporada estival”.

Para la octava edición, Lucía Guillén ha explicado que se contará con algunas de las propuestas ya consolidadas como los juegos y talleres embrujados para los más pequeños a cargo de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos y la ludoteca de Sallent, el sábado a las 11.30 horas. El domingo será el turno de la actuación del Grupo de Bailes Medievales de Jaca para amenizar el mercado, y tendrá lugar el paseo botánico para conocer las plantas que usaban en su día las brujas, de la mano del colectivo Foratata.
Actuaciones teatrales
Junto a las propuestas ya conocidas, se abren paso actuaciones de la compañía Lolita Corina para poner en escena un pulso teatral sobre el mundo de lo sobrenatural de dos mujeres, o la obra Pienso mesa, digo silla, de la compañía oscense Viridiana, que tendrá lugar el sábado por la tarde. Asimismo, el espectáculo Brujas, Ogros y Lobos hará las delicias de los visitantes más valientes con LÜ de Lourdes el sábado al caer el sol. El domingo será el turno de las historias de El sótano encantado, que recogen el guante con nuevos relatos terroríficos y cuentos misteriosos.


Grabados de Sergio Aragón y charla de Jesús María Usunariz
También se podrá ver una exposición de grabados de Sergio Aragón, que centrará el tema de la charla posterior sobre la relación entre las danzas mortuorias y diferentes momentos clave de la humanidad. La vertiente histórica viene reforzada en esta ocasión por la conferencia centrada en el papel de los niños en los procesos de brujería en el Pirineo, a cargo del profesor de la Universidad de Navarra Jesús María Usunariz.
Bien entrada la noche del sábado el público podrá introducirse en el pasaje del terror para el que en esta edición se dispensarán entradas gratuitas en el ayuntamiento durante los tres días del evento para evitar esperas y aglomeraciones. El programa se cierra el domingo por la tarde con la entrega del galardón al Brujón o Bruja del año a un vecino o vecina del pueblo cuya identidad se mantiene en secreto hasta ese mismo día.
«Desde el siglo XIV hasta el siglo XVII, hay una progresión creciente en los procesos por brujería en toda la península. En el Valle de Tena hay constancia de varios testimonios de caza de brujas ya en el siglo XV, siempre contra mujeres bearnesas, cuya fama de hechiceras venía de lejos. A principios del siglo XVI, una epidemia de brujería asoló el valle, que se defendió de ella dictando un feroz Estatuto de Desaforamiento en 1525. Varias presuntas brujas fueron sentenciadas en virtud del Estatuto. Uno de los casos más terribles fue el de Maria Sorrosal, de familia hidalga (nobleza no titulada), y mujer del infantón Juan Martón, a quien ni su estado de preñez ni su elevado rango social salvaron del ajusticiamiento. Pero el más espeluznante de los casos de brujería se da en el Valle de Tena – con especial gravedad en Tramacastilla y Sandiniés- entre 1637 y 1642, en que una posesión demoníaca afectó a 72 mujeres. Este suceso, uno de los más notables de Europa, aparece en las crónicas de varios eruditos, inquisidores o teólogos de la época, algunos de cuyos testimonios son impagables. El gran encausado fue Pedro de Arruebo, labrador y ganadero, señor de la pardina de La Artosa. Persona instruida, poseía libros prohibidos en varias lenguas y conocía el francés. Rico, atractivo, mujeriego, inteligente, caprichoso y violento, se le acuso de endemoniar a más de 1.600 personas y sufrió tres procesos, junto a sus complices Miguel Guillén y Juan de Larrat. Fue condenado a galeras, de donde dicen escapó sin saberse como y volvió a La Artosa a seguir endemoniando a las gentes del Valle. Todas las mozas pellizcadas o cogidas por el brazo o la mano izquierda quedaban endemoniadas (…)». (Extracto de LAS BRUJAS DE TENA)