Pirineo en amarillo: Un verano complicado para todos

Pirineo en amarillo: Un verano complicado para todos. Por David Ruiz de Gopegui.
Pirineo en amarillo: Un verano complicado para todos. Por David Ruiz de Gopegui.

Tenemos un Pirineo amarillo, desgastado, seco y diferente. Estamos viviendo un verano difícil, un paisaje que sin color que no da tregua, en una situación excepcional que debería hacernos reflexionar a todos, a cada uno en nuestro ámbito, nuestra profesión y nuestra relación con el medio que nos rodea.

Un Pirineo en amarillo

Hoy me acuerdo de  nuevo de los pastores y ganaderos de este Pirineo más occidental, y lo personalizo en los ganaderos de Borau, que hace unas semanas, como se viene haciendo desde tiempos inmemoriales,  acompañaban a sus animales hasta el último escalón verde de estas montañas, bajo las paredes grises del laberinto kárstiko de Los Lecherines. Un espacio que se mantiene húmedo y verde hasta que el otoño comienza a hacer presencia en el paisaje.

Julio, agosto y septiembre son los meses de las tascas y los prados verdes de alta montaña, haciendo coincidir el final del verano con la escasez de los recursos bien aprovechados por las vacas, las ovejas y las cabras, en el caso de las montañas de Borau.

El paisaje se tiñe de amarillo a la espera de una lluvia que no llega

Una simbiosis perfecta donde cada uno aporta algo; con esa forma que tiene la naturaleza de hacer coincidir los momentos en un equilibrio y una justicia digna de admiración.

Hoy la incertidumbre se intuye en el ir y venir de los protagonistas, que sin descanso acompañan y visitan los altos puertos de estas montañas en busca y espera de una lluvia que no llega, y que está convirtiendo este largo verano en una excepción que arrastra a muchos a hacerse la misma pregunta: ¿Cuándo llegará el agua? Si la situación continúa así, es indudable que los tiempos seguirán cambiando. Y veremos cómo el tradicional verano de puerto ganadero se acortará y afectará en esa cadena de importantes eslabones que es la naturaleza.

Como ya cantaba Ixo Rai allá por 1997, «sin agua somos más serios; se nos sala hasta el humor…»

Como ya cantaba Ixo Rai allá por 1997, «sin agua somos más serios; se nos sala hasta el humor…». La sequía afecta a las alturas del Pirineo mientras los incendios asolan una Península que a duras penas pueden combatir todas esas cuadrillas de bomberos forestales, de los que, por cierto, únicamente  nos acordamos cuando el fuego rodea nuestra casa.

Ahora dejaremos que el agua llegue, que llueva y que reguemos con moralidad y reflexión toda la situación climática que nos rodea, y que a todos nos afecta de una u otra forma.

Hoy, desde las montañas del Mirador del Pirineo, estas son las reflexiones que me apetecía compartir con vosotros, lectores de Jacetania Express: que llueva, por esos ganaderos, por esos trabajadores forestales y por todos los que habitamos estos hermosos parajes. 

Por David Ruiz de Gopegui/Ojos Pirenaicos (texto y fotos)

Una mirada al Pirineo es una idea original de Jacetania Express, donde, de la mano de David Ruiz de Gopegui, pretendemos acercar rincones y miradas diferentes de este nuestro Pirineo a todos los lectores, invitando siempre a la reflexión y al respeto por el medio natural que nos rodea.