Más de 200 personas, la mayor parte comensales franceses, participaban este jueves en la iniciativa Gastro Pyrénées- Pirineos, donde varios restauradores jacetanos hicieron de embajadores de la comida aragonesa y de kilómetro cero al otro lado de la frontera.
Ocho restauradores de Jaca mostraban el patrimonio gastronómico de la Jacetania en Olorón. El intercambio gastronómico, organizado por las asociaciones empresariales de Jaca -AEJ y Acomseja-y del Béarn, lograba su objetivo de acercar la cocina local y los productos autóctonos de la comarca de la Jacetania, como atractivo y aliciente turístico, al público francés, después de que los restauradores franceses hicieran lo propio en una cena celebrada recientemente en Jaca.
Así, en esta ocasión, la cita fue en Olorón. Representantes de las instituciones jacetanas -entre ellos, los concejales Victoria Mora y Santiago Tomás, en representación del Ayuntamiento jaqués, y Patricia Acedo y Manuel Lasala, por parte de los empresarios- acudieron hasta la ciudad hermana para participar en la cena.
Con esta iniciativa, impulsada desde el Ayuntamiento de Jaca y organizada por las asociaciones empresariales, se busca «poner en valor el potencial gastronómico de Jaca y de la zona francesa vecina a la Jacetania como aliciente turístico y elemento diferenciador que pueda atraer a numeroso público que se sienta interesado por descubrir la riqueza gastronómica de esta parte de los Pirineos», ha explicado el Ayuntamiento. En esta iniciativa, participan el restaurante Lilium, el Molino de Larués, Hotel Real, restaurante Biarritz, albergue Escuelas Pías, La Cadiera, pastelería La Suiza y panadería Sayón de Jaca.
En el encuentro, se degustó un menú compuesto por cuatro aperitivos en la zona del jardín, y después se pasó al salón donde se sirvieron los dos entrantes y un plato de pescado y carne, finalizando con el postre.
El menú degustación con maridaje estaba compuesto de Tartare de longaniza de las carnicerías jacetanas con tomate rosa y pan de hogaza al aceite de oliva del Somontano; Ravioli crujiente de queso O´xortical, untado con tomate y emulsión de albahaca; Canelón de caviar de trucha del río Aragón; Arroz brazal del Pirineo con verduritas, alioli de azafrán de Atarés y queso Flor de Aspe.
Como entrantes, se sirvieron Huevos camperos de Ulle (Jacetania), cocinados a baja temperatura, con usones y jamón de Teruel; Borrajas de la ribera del Ebro en salsa de callos de bacalao y berberechos; Esturión del Cinca confitado con zumo de piña en escabeche, coliflor encurtida y polvo de cítricos; Cuello de ternasco de Aragón con migas y pistachos.
De postre se presentó el Ajedrezado jaqués. Pan genovés con aceite de Bierge, crema de quesos de Radiquero los Meleses y gelatina de frutas, café y petit vous; Roca de almendras caramelizada con chocolate negro; Sopa de frutos rojos con espuma de yogurt de oveja de Fonz y Joya de mazapán y yema. Además, hubo degustación de Gin Tonics Premium, con Gin Premium Ordesano. Y como bebidas, Agua de Veri (Pirineo); Viñas del Vero tinto Cabernet Sauvignon Merlot, Viñas del Vero blanco Gewürztraminer, Bodegas Sommos Glárima Chardonnay, Viñas del Vero rosado Merlot Tempranillo, Bodega Pirineos Señorío de Lazán Reserva de 2010, Cava Reyes de Aragón.