Si hay alguien capaz de despertar la pasión por los hechos históricos que marcaron el pasado en nuestro país, ese es, sin duda, Jordi Bru. Fotógrafo profesional especializado en fotografía militar, Jordi Bru es un guerrero que se lanza a la conquista de la historia a través de su objetivo. Durante estos días, prepara en la Jacetania su próximo trabajo, una exposición sobre la evolución del Regimiento de Infantería Galicia 64 de Cazadores de Montaña que podrá contemplarse en Jaca la próxima primavera, coincidiendo con los actos de celebración del centenario de la llegada a Jaca del Galicia 64, en 1918.

Fotografías de un realismo impresionante, tanto que parece que tienen alma
La primera vez que tuve el privilegio de acercarme a la obra de Jordi Bru fue hace dos años, con motivo de la muestra conmemorativa del 50 aniversario de la creación de los Grupos de Rescate Especial de Intervención en Montaña (GREIM) que acogió el Palacio de Congresos de Jaca. Una colección de fotografías de un realismo estremecedor, tanto que parecía que tenían alma. Recuerdo que, en aquel momento, me costaba apartar la vista de aquellas imágenes, de un magnetismo impresionante, patrimonio exclusivo y seña de identidad de su autor. Porque Bru es inmenso. Su pasión es tal por su trabajo, que es capaz de captar el momento histórico, pero también el sentimiento del personaje en ese preciso instante, inmerso en una escena casi mística, recreada tal y como sucedió en su momento. Algo que muy pocos son capaces de transmitir.
Jordi Bru es un fotógrafo profesional especializado en fotografía histórica militar. Retrata ejércitos y batallas a partir de instantáneas tomadas en recreaciones reales de los acontecimientos más destacados de la historia militar española.
Inspirado en los pintores del siglo XIX, sus obras son algo más que fotografías. Jordi Bru juega con la emoción, con el dramatismo, con la teatralización. Lleva la escena al extremo, buscando conmover al espectador. Se mete, incluso, en sus propias composiciones, presentando un punto de vista muy atractivo pero, al mismo tiempo, sorprendente y desconocido para los que vemos su trabajo desde el otro lado.

Jordi Bru sale al rescate de la historia del Regimiento Galicia
En esta ocasión, Jordi Bru sale al rescate de la historia del Regimiento Galicia, “uno de los más antiguos en servicio ininterrumpidamente del mundo, desde 1560, que se sepa”, explica. En concreto, desde el siglo XVI hasta nuestros días. “Para ello, he tenido que acudir a recreaciones de Tercios Españoles de los siglos XVI y XVII” -apunta Bru, resaltando las diferencias y la evolución entre ambas épocas-. Haciendo alarde de un rigor incuestionable, en su próxima muestra abordará también el siglo XVIII, la Batalla de Glenshiel que llevó al Galicia hasta tierras escocesas en 1719, el desastre de Argel, la participación del Regimiento en la Batalla de Bailén o en la Guerra de la Independencia… Oyarzun y Somorrostro en las Guerras Carlistas… la Guerra de Cuba… Nada se resiste al objetivo de Bru, que arrastra tras de sí a grupos de recreadores de toda España y parte del mundo en busca de la mayor autenticidad posible para sus creaciones.
Las maniobras del Galicia en invierno y en época estival e, incluso, las misiones en Bosnia, Afganistán o el Líbano no han escapado a convertirse en atrezzo para las historias de Jordi Bru. Sus personajes son reales, transportados como por arte de magia a otras épocas. Tras el tratamiento de todo el material con la exquisitez a la que nos tiene acostumbrados, la exposición de Jaca presentará algunas de las efemérides más importantes para el Regimiento Galicia 64 desde su creación, donde más de uno podrá reconocerse en el soldado que cae herido de muerte de su caballo o perdido en mitad de una contienda.

Localizaciones en la Jacetania
Ípas, Santa Cruz de la Serós, la Escuela Militar de Montaña de Jaca, Rioseta o Santa Cilia son algunas de las localizaciones elegidas para captar algunas imágenes -junto a otros lugares designados a conciencia, como Bailén o, fuera de nuestro país, Holanda-. Nada es casual en la obra de Jordi Bru: “Siempre que sea posible acudir al sitio exacto de la batalla, se va… Y si no, lo recreo”.
Y así lo hace, tras interminables horas de estudio e investigación y miles de kilómetros recorridos. El resultado: 26 escenas que devolverán al espectador al fragor de la batalla o a la intensidad de una carga de caballería, pero también a la calma tensa de los segundos previos a los hechos que marcaron distintos momentos fundamentales para poder entender nuestra historia, al ambiente de un campamento militar o a una columna de soldados avanzando por un camino hacia un destino incierto. Algo que no hubiera sido posible sin el respaldo del Ejército Español (del actual Regimiento Galicia -“tanto de soldados, de equipamientos, como de piezas de museo”, matiza-; de particulares, como el coleccionista Augusto Allué de Jaca; o del Estado Mayor de la Defensa).

Esta semana, coincidía de nuevo con Jordi Bru, que me invitaba a participar en una de sus sesiones de trabajo y me permitía vivir, en primera persona, la pasión que pone en cada una de sus composiciones.
Comenzaba diciendo que Bru es un guerrero porque su trabajo es una batalla continua por la perfección. Bru se empapa de historia antes de lanzarse a la contienda. No deja nada al azar; no permite que ningún detalle, por nimio que pueda parecer, pueda interferir entre la realidad de un hecho histórico y sus composiciones. Estudia al milímetro el escenario y los acontecimientos para que no dejar cabida al mínimo desfase. Desdibuja la escena y vuelve a dibujarla una y mil veces, tantas como sea necesario. Mima sus composiciones y las reproduce hasta la obsesión; cuida cada detalle y busca que, al final, el espectador se enamore de cada rostro, de cada mirada, de cada expresión y de cada uno de sus personajes. Y el resultado es, simplemente, magistral. Una obra única para un artista único.
Por Rebeca Ruiz








Más información:
http://www.jordibrufotografo.com/
Para saber más acerca de Jordi Bru:
https://www.elmundo.es/album/cronica/2018/08/02/5b5d9af2268e3ef53b8b460a.html