Canfranc Pueblo regresa al Medievo este fin de semana y sus calles se vuelven a llenar de animación con una nueva edición de la Feria del Camino. Un certamen con identidad propia, que desde hace años se convierte en una de las citas más esperadas del Valle del Aragón, y que pone en valor la historia y la tradición de este emblemático pueblo situado en el corazón del Camino Francés.
Artesanos y el campamento de la Mesnada de las Tres Estrellas, un guiño al Medievo
La feria, que comenzaba con mucha animación hace unas horas, continuará durante todo el fin de semana. Una quincena de expositores artesanos ofrecen sus productos en la Plaza de la Iglesia, igual que se hacía hace siglos, evocando los mercados tradicionales que se encontraban los peregrinos cuando iban hacia Santiago.
Además, el campamento medieval se puede contemplar a la entrada del pueblo. Allí se encuentra el caballero Lupercio de Canfranc que, junto a los recreacionistas de la Mesnada de las Tres Estrellas -procedentes del mismo Canfranc, y del País Vasco, Segovia y Zaragoza-, trasladan al espectador a otra época.
Junto a Fray Damián el Peregrino, que recorre de un lado a otro el pueblo recibiendo a propios y extraños, y contando historias y leyendas, son los protagonistas del certamen.
Una vuelta al Medievo marcada por las limitaciones de los protocolos COVID
La concejala de Canfranc Pueblo y Ferias de Canfranc, Loreto García, mostraba su satisfacción por el hecho que, finalmente, la Feria del Camino se haya podido celebrar, aunque con las limitaciones que marcan los protocolos COVID.
«Como no sabíamos muy bien cómo íbamos a poder celebrarla, este año no hemos traído muchos puestos. Hemos tomado medidas y hemos distanciado mucho a los artesanos, e insistimos en el uso de la marcarilla», explica García, que apela a la prudencia y a la responsabilidad individual para que se puedan cumplir las normas.
Aunque las fiestas se han tenido que suspender como consecuencia de la pandemia, la programación cultural y lúdica de Canfranc se está desarrollando con una normalidad relativa, adaptada a las circunstancias. «Se ha podido celebrar Pirineos Classic. Y ahora, a final de agosto, tendremos también la Feria Gastronómica en Canfranc Estación, en el Paseo Fluvial, y que la haremos coincidir con la Feria del Libro, los días 21 y 22 de agosto, en la entrada de la iglesia», recuerda la concejala.
A lo largo de las dos jornadas de feria, se sucederán las apariciones de Fray Damián, con actividades para el público familiar, y las exhibiciones en el campamento medieval. «No hemos querido poner horas fijas para evitar que se concentre mucho público en la misma zona», señala Loreto García. Así que entrar en Canfranc Pueblo este fin de semana trasladará al visitante al Medievo, de sorpresa en sorpresa.
Por Rebeca Ruiz (texto y fotos)
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