La asociación Jaca sin perder el norte, continuando con la información a los políticos y representantes locales de Jaca, organizaba el 21 de septiembre una reunión con los concejales de Chunta Aragonesista, a la que asistía Javier Blasco, excusando la ausencia de Orosia Campo, para informar acerca de la variante de la autovía A21-A23 a su paso por la ciudad de Jaca.

El portavoz del CHA mostró interés acerca del impacto medioambiental, económico y patrimonial que supondría la variante a su paso por el Valle del Aragón. Se puntualizó que esta asociación está a favor del progreso que supondría la construcción de una autovía, pero siempre buscando la alternativa con menos afección medioambiental.

Según una nota de prensa enviada por la asociación, se trasladaba al edil del CHA «la preocupación por la omisión de respuestas concretas del alcalde de Jaca ante la inexistencia de estudios de movimientos de tierra del Barrio Norte de Jaca y del soterramiento del Camino de Santiago».

Javier Blasco y JSPN coincidieron en que un plan urbanístico de viviendas «nunca debió hacerse cuando existía un proyecto de autovía por la misma zona» y en la solicitud de una moratoria para realizar un nuevo estudio de Impacto Medioambiental de acuerdo con la legislación vigente.

Durante el encuentro, se expuso que «si la construcción de la autovía por el Pirineo francés se descartó en su momento, ya no tiene sentido construir una vía de comunicación por la zona norte de Jaca, debido al destrozo ecológico y paisajístico del que, en parte, vive la ciudad».

Concluyó la reunión con CHA en que estudiarían detenidamente «las afecciones de la variante a su paso por el valle del Aragón» y en que ambas partes «buscan el bien de Jaca y las menos repercusiones para sus ciudadanos».