
por Rebeca Ruiz
La junta de gobierno local del Ayuntamiento de Jaca, celebrada ayer, día 1, aprobaba la adjudicación de las obras de demolición de la antigua pista de hielo, de acuerdo con el resultado del concurso público de licitación que adjudicó la actuación a la empresa “Reciclados y Demoliciones San Juan, S.L.” por un valor de 142.320 euros más 29.887 euros de IVA, cuando el precio inicial de licitación había salido en 282.999,97 más 59.429,99 euros de IVA. La adjudicación se ha realizado, por lo tanto, prácticamente por la mitad del precio de salida. A este concurso público se presentaron veintitrés empresas. Siguiendo los trámites burocráticos habituales y necesarios, es previsible que la demolición de la vieja pista de Jaca comience en este mes de septiembre, dentro de unos días.
El derribo de este edificio es un paso imprescindible para la continuación del proyecto de la nueva ciudad deportiva de Jaca, que comenzó a impulsarse hace más de diez años y cuyo paso más ambicioso fue la construcción de una nueva pista que pudiera responder a la demanda actual de los deportes de hielo e invierno, con suficiente proyección de futuro, con capacidad para albergar eventos internacionales y con una estructura de vanguardia que resultara polivalente. Todo ello fue el primer gran paso para convertir a Jaca en la ciudad de referencia nacional e internacional en el campo de los deportes de hielo e invierno, que tuvo su punto álgido en la celebración de la “universiada” de 2007 en la pista recién estrenada.
Ahora, en el panorama nacional deportivo, aparece la necesidad de crear un centro de formación de técnicos de deportes de hielo e invierno, que se encuentra entre las actuales preocupaciones de los representantes de la federación española y los responsables de la administración nacional y las autonómicas que se ocupan de este tipo de deportes. Por ello se trató en algunas reuniones mantenidas en Jaca el pasado mes de marzo entre responsables de varias administraciones y la Federación Española de Deportes de Hielo, como informaron en su momento tanto los responsables de la Federación como los de la administración autonómica. La falta de un centro de técnicos especializados en estas disciplinas deportivas, que no existe en España, apremia, cada vez más, a los responsables del deporte español ya que lo consideran una carencia que hay que paliar, así como una infraestructura imprescindible cuanto más se avanza en la categoría y en el nivel deportivo.
Esta inquietud coincide con el proyecto que Jaca comenzó a construir para crear el Centro Especializado de Alto Rendimiento (CEAR) y que, en los últimos años, se quedó paralizado. La recuperación de este proyecto respondería a las necesidades que ahora contempla la federación española y otras administraciones a las que también les interesa completar sus dotaciones e infraestructuras en la formación y enseñanzas deportivas para poder mejorar la atención que prestan, desde la edad escolar, a todos los practicantes de las disciplinas de invierno y hielo, con el fin de conseguir un nivel cada vez más competitivo. Por eso ahora es una buena ocasión.
El antiguo y emblemático Palacio de Hielo jaqués se inauguró en 1972 y se cerró en 2008, después de que entrara en funcionamiento la nueva pista construida para la celebración del Festival Olímpico de la Juventud Europea (FOJE) en 2007. Desde entonces, no se ha podido o no se ha sabido encontrar una utilidad al simbólico inmueble en el que, durante más de 35 años, se celebraron importantes eventos sociales y deportivos, de índole nacional e internacional, como los campeonatos del mundo de patinaje artístico, el festival folclórico de los Pirineos o la Universiada 81, entre otros.
El paso del tiempo, las características de la construcción que se queda hoy en día obsoleta, así como los materiales de construcción empleados, impiden que actualmente se le pueda dar ninguna solución de continuidad al edificio y hace, además, inviable cualquier iniciativa que quiera contemplarse para el futuro próximo con la vieja pista. Antes de que se cerrara definitivamente, es decir, antes de 2007, durante sus últimos años de funcionamiento, la Administración regional y estatal ya habían advertido en varias ocasiones de que ni el inmueble ni los servicios que prestaba cumplían con los requisitos legales en aspectos tan importantes como la seguridad y la salud pública.
Así, un reciente informe de los técnicos municipales no deja lugar a dudas. El análisis de la situación por parte de los expertos de la Administración local, firmado en abril de 2016, señala que “el edificio de la antigua pista de hielo de Jaca se encuentra en situación legal de “fuera de ordenación” al resultar incompatible con la ordenación urbanística vigente contemplada en el Plan Especial de Reforma Interior de la zona deportiva de Jaca. El informe de los técnicos cualificados abunda en que un proyecto de demolición de la antigua pista fue redactado en 2011 por el arquitecto técnico Javier Sánchez Cruzat, con un presupuesto de contrata de casi 350.000 euros y tres meses como plazo de ejecución.
El jefe de Urbanismo y la arquitecta municipal añaden en su examen que “son numerosos los beneficios que se derivarían para la ciudad de la demolición del viejo edificio, como la vemos necesaria para la correcta existencia y funcionamiento del nuevo edificio y de otras instalaciones deportivas del área pues permitiría terminar la urbanización exterior y con ello desarrollar todas sus posibilidades con seguridad y comodidad. La ciudad ganaría también para su uso público no sólo un gran espacio libre y polivalente, a la altura de la avenida Perimetral, que redundaría en el óptimo funcionamiento de todo el complejo de instalaciones deportivas, además de un espacio semejante en varias plantas bajo esa cota”, según explican literalmente.
Los técnicos del Ayuntamiento califican el estado de la vieja pista como “ruina urbanística”, “ruina económica” y “ruina técnica” del edificio.
Las conclusiones son rotundas: “La conservación del edificio es radicalmente incompatible con la ordenación urbanística del área deportiva aprobada en 2002. El edificio carece de cualquier valor arquitectónico que pudiera derivarse de su diseño formal o de las soluciones constructivas empleadas. De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 261 del texto refundido de la Ley de Urbanismo de Aragón, decreto legislativo 1/2014 de 8 de julio, el edificio se encuentra en situación legal de ruina económica y urbanística y, muy probablemente, también técnica.”
Los técnicos cualificados añaden, en sus conclusiones, que “la rehabilitación del edificio es inviable dado el agotamiento generalizado de la estructura y los materiales utilizados en su construcción. Su reforma integral, que pasaría inexorablemente por su demolición previa, debería definir previamente el uso reasignado y en cualquier caso tendría un coste aproximado de 15 millones de euros”, lo que firman el pasado mes de abril, en Jaca, el jefe de Urbanismo y la jefa del servicio de Obras y Servicios.
La construcción de la nueva “ciudad deportiva” de Jaca, además de refrescar, rejuvenecer y modernizar el paisaje urbanístico de la ciudad puede representar un aldabonazo que reactive el desarrollo económico y social de toda la comarca de la Jacetania, así como de todo el Alto Aragón, si Jaca consigue un CEAR que sea referencia internacional para el dinámico mundo de los deportes de invierno, sector muy ligado al turismo y que, por lo tanto, resultaría complementario para los intereses de la zona y la ciudad podría sumar sinergias. Todo ello supondría un revulsivo económico y social de peso que ahora necesita la sociedad jacetana.