por Rebeca Ruiz
La respuesta de los jacetanos con la donación de juguetes ha superado todas las expectativas. Cientos de artículos infantiles se han recogido durante los días en los que ha estado abierta la campaña, que comenzó a celebrarse en Jaca en 1985 (es decir, más de 30 años, a través de distintas instituciones, organizaciones o colegios) y que hoy es una cita solidaria ineludible en las navidades de la localidad, cuyos habitantes se vuelcan con esta acción en cada edición. Incluso ha habido ciudadanos que han comprado los juguetes para contribuir a la causa con artículos nuevos, sin usar.
Este año, como novedad, se sumaba a la iniciativa el Club Hielo Jaca, que, a través de su vicepresidente, Sebastián Palacios, hacía entrega este lunes a la Comarca de la Jacetania de los juguetes recogidos en la campaña Una entrada por juguete, puesta en marcha por el CHJ para colaborar con el programa de la institución comarcal, el Ayuntamiento jaqués y el grupo Scout de la ciudad para que ningún niño se quede sin regalos en Navidad. En total, se han recogido más de 350 juguetes (que se cambiaban por un pase para disfrutar del último partido del año de hockey disputado el pasado sábado por el CHJ contra el Puigcerdà). Además, el Club Hielo Jaca aportará 300 euros en efectivo para esta causa.
Estos objetos se incorporarán a los recogidos en el local de la Calle del Carmen en las últimas semanas. Ahora, los responsables de la campaña, a través de los miembros del grupo Scout, se dedicarán a realizar la labor correspondiente de limpieza, selección, envoltorio de regalos y distribución por edades para repartir posteriormente los regalos entre los niños y niñas de 6 a 12 años de familias que no pueden asumir el gasto de los regalos de Navidad. El año pasado, la campaña llegó a cerca de medio centenar de familias. Finalmente, han sido cientos de juguetes, juegos, libros y otros objetos los que se han reunido durante los días en los que ha estado abierta la campaña de recogida. Con ellos se atenderá a las necesidades de las familias que lo planteen a través del Servicio Social de Base de la Comarca de la Jacetania. Los juguetes que sobren después de cubrir todas las peticiones planteadas en la Comarca de la Jacetania se entregarán a una organización no gubernamental para que los distribuya entre otros pequeños en situación de necesidad.
Sergio Lope, gerente del Club Hielo Jaca, destacaba el hecho de que “Jaca sigue siendo una ciudad solidaria”. En este sentido, muchas de las personas que acudieron al partido y donaron artículos compraron su entrada a pesar de que se les entregaba gratis si aportaban un juguete. Por eso, el Club Hielo Jaca aportaba también 300 euros en efectivo. Igualmente, la Comarca de la Jacetania contempla una partida económica destinada a comprar pilas, envoltorios y juguetes en el caso de que alguna franja de edad no quede cubierta con lo donado.
Una entrada por juguete es la primera de las iniciativas con las que el Club Hielo Jaca pretende “salir de la pista de hielo” y contribuir, en el plano social, a causas solidarias, de manera que para el próximo año, cuando se cumple el 45 aniversario del club, ya se están organizando eventos en este sentido, con la finalidad de dar a conocer los deportes de hielo en la ciudad y en la comarca y, al mismo tiempo, contribuir en programas sociales.
Los juguetes eran recibidos por Montse Castán, presidenta de la Comarca de la Jacetania, que destacaba la importante “labor social” que supone esta iniciativa “en momentos como la campaña navideña, de más consumo y más gasto y, por lo tanto, de mayor responsabilidad en aquellas familias que realmente no pueden llegar con sus ingresos a las perspectivas o a las esperanzas que puede tener un hijo dentro de ese entorno familiar”. En el mismo sentido se pronunciaba la concejala del Ayuntamiento de Jaca María Victoria Mora, poniendo de manifiesto la solidaridad y la respuesta de los jacetanos a la campaña. La entrega se hace en base a las solicitudes de las familias cuya situación no les permite comprar juguetes, a través de un sistema que mantiene el anonimato de quien recibe los paquetes y teniendo en cuenta un baremo establecido previamente que garantiza que esos regalos llegan a familias que realmente los necesitan, explicaba la concejala.