El Galicia 64 recibe el cariño de Jaca en el Día de la Inmaculada

Entre aplausos y muestras de cariño hacia los militares del Galicia 64 y al paso de su Bandera se desarrollaba este viernes en Jaca el tradicional desfile del Día de la Inmaculada por la céntrica Avenida del Primer Viernes de Mayo. Miles de personas arroparon al Regimiento de Jaca con motivo de los actos centrales en honor a la patrona de España y del Arma de Infantería.

Honores a la Inmaculada en la Ciudadela de Jaca

El patio de armas de la Ciudadela de Jaca, abarrotado de público, volvía a convertirse este viernes, Día de la Inmaculada, en el escenario del tradicional acto castrense con motivo de la festividad de la Inmaculada Concepción, patrona de España y de la Infantería Española. El Regimiento de Infantería Galicia 64 de Cazadores de Montaña rendía un año más honores a la Virgen de la Inmaculada Concepción con una parada militar presidida, en esta ocasión, por el general jefe del Mando de Tropas de Montaña Roncesvalles, Francisco Germán Martínez Lozano, acompañado por autoridades militares, religiosas y civiles. Entre ellas, el alcalde de la ciudad, Carlos Serrano.

La formación en la Ciudadela de Jaca estuvo integrada por la Escuadra de Gastadores, el Mando del Regimiento, el Batallón de Cazadores de Montaña Pirineos I/64 con cuatro compañías de cazadores y la Compañía de Esquiadores-Escaladores 1/64. En una fría, pero soleada mañana, cientos de personas pudieron acompañar en el interior de la fortaleza al Galicia en los honores militares a la patrona.

LECTURA DEL MILAGRO DE LA BATALLA DE EMPEL EN LA CIUDADELA

En el transcurso del acto se daba lectura, como cada año este día, a un fragmento histórico del Milagro de la Batalla de Empel. Un hecho bélico que tuvo lugar en la noche del 7 al 8 de diciembre de 1585 en Flandes, y que dio lugar a la proclamación de la Inmaculada Concepción como patrona de los Tercios Españoles, actual Infantería Española.

Himno, HOMENAJE A LOS CAÍDOS Y distintos RECONOCIMIENTOS

Homenaje a los caídos, salva, imposición de medallas y reconocimientos; la entrañable despedida de la Bandera de los militares que pasan a la reserva y el no menos emotivo canto del himno de Infantería, a viva voz, se fueron sucediendo en el solemne acto del Castillo de San Pedro. Todo ello, siguiendo los acordes de la Banda de Música de la Academia General Militar de Zaragoza y la Banda de Guerra del Regimiento Galicia.

Un acto, el de la Ciudadela de Jaca, donde no podían faltar las palabras del jefe del Regimiento de Infantería Galicia 64 de Cazadores de Montaña, el coronel Antonio Ortiz. Y un momento especialmente cargado de sentimiento, teniendo en cuenta que el de ayer era el último evento oficial del Coronel Ortiz al mando del Regimiento.

Los valores y el espíritu de los hombres y mujeres que forman el Regimiento de Jaca

En su alocución, el jefe del Galicia hacía alusión a la victoria de los Tercios Españoles en Empel para poner en valor los principales hechos de armas que han tenido como protagonista al Regimiento de Jaca. «Desde el sitio de Breda -recordaba el coronel Ortiz- hasta las colinas escocesas de Glenshiel; desde los Alpes austriacos hasta los campos andaluces de Bailén; desde las tropicales tierras cubanas hasta las áridas tierras norteafricanas; o, más recientemente, desde el corazón de Europa en Bosnia i Herzegovina hasta los inhóspitos terrenos asiáticos de Afganistán», donde los militares de Jaca desplegaron hasta en ocho ocasiones a lo largo de los 19 años y cuatro meses que se prolongó la presencia de las tropas españolas en aquel país.

«Los infantes -continuaba Ortiz- somos herederos de aquellos Tercios que preferían la muerte a la deshonra. Pero, además, los cazadores de montaña somos herederos de ese espíritu inmortal que nos impulsa a enfrentarnos, día a día, a la dureza de la instrucción en un entorno hostil que no perdona los errores, como es el de la montaña».

Lo hacía poniendo de relieve «la obligación de mantener y mejorar ese espíritu especial, fomentando día a día los valores que hacen inquebrantable nuestra moral, los valores que dan sentido a nuestro esfuerzo diario y que constituyen la médula de nuestra vocación de infantes y de cazadores de montaña: la austeridad, la fortaleza, el esfuerzo, el sacrificio, la lealtad, el valor y el compañerismo».

Tradicional desfile por la ciudad en el Día de la Inmaculada

El broche de oro a los actos en honor de la Inmaculada llegaría, un año más, con el tradicional desfile por la Avenida del Primer Viernes de Mayo, que completaría la crónica de una jornada que volvió a dejar grandes imágenes para el recuerdo.

A lo largo del recorrido que separa la Ciudadela de Jaca del Paseo de la Constitución -donde habitualmente se coloca la tribuna de autoridades-, el paso de los militares estuvo arropado en todo momento por los vivas y aplausos que les dedicó el numeroso público que abarrotaba ambos lados de la calle. Un gesto con el que la ciudad de Jaca volvió a demostrar, una vez más, su cariño hacia su Regimiento.

Por Rebeca Ruiz. Imágenes de Ana López Artillo

ÚLTIMAS NOTICIAS: