por Rebeca Ruiz
Numerosas personas vivieron este viernes el encendido de la Zoca de Navidad en Jaca, un evento que se celebró en la Plaza de la Universiada y que marca el inicio de las fiestas navideñas con un guiño a lo tradicional y a los rituales más ancestrales de esta tierra.
El acto cargado de simbolismo y tradición, estaba organizado por la Asociación de Empresarios de Comercio y Servicios de la Jacetania (Acomseja) y por los comerciantes de la Avenida Juan XXIII. El evento comenzó con la narración del cuento O Chiflo de Navida, tras lo que se llevó a cabo el ritual del encendido de la Zoca al son de los Gaiters de Chaca, en una especie de ceremonia dirigida por Fran Ponce, que iba explicando a los presentes todos los pasos.
La Zoca es un tronco que se encendía, tradicionalmente, en los hogares pirenaicos, siguiendo un rito ancestral que terminaba con el esparcimiento de las cenizas por los campos de labor para asegurar una buena cosecha. Con la desaparición de las chimeneas de las casas antiguas, esta costumbre, muy arraigada en la zona durante la época navideña, fue desapareciendo, por lo que desde hace algunos años se quiere recuperar como parte importante de la historia de Jaca y de las gentes de esta tierra.
El encendido de la zoca, cada Nochebuena, supone “un rito de regeneración de la vida”. Hoy se considera, además, “un vínculo de amistad entre los jacetanos para que perdure la tradición”. Así, durante el acto del encendido de la Zoca de Navidad, un gran protagonismo se lo llevaron los más pequeños. Una vez concluido el rito, los asistentes pudieron disfrutar de una merienda popular en la plaza.
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