por Rebeca Ruiz
Jaca se prepara ya para la celebrar el Día de Todos los Santos, para un fin de semana en el que se espera que se cuenten por miles las personas que pasen estos días, festivos pero también con una gran carga de tradición, en la localidad. Se trata de un fin de semana a caballo entre el final de la temporada turística estival y el comienzo de la temporada invernal, de manera que las expectativas son buenas tanto para la hostelería como para el comercio. Además, en los últimos años, la promoción de la época otoñal en la montaña ha hecho que sean muchos los que se planteen pasar unos días, coincidiendo con la festividad de Todos los Santos, en destinos como Jaca o su comarca, donde es muy amplia la oferta de turismo rural. A todos estos visitantes hay que sumar los jacetanos que viven fuera y que estos días vuelven para cumplir la tradición y visitar a sus seres queridos en el cementerio, por lo que serán miles las personas que lleguen este fin de semana a la zona. Tráfico prevé más de 500.000 desplazamientos sólo en Aragón, de los cuales la mayor parte tiene como destino la zona del Pirineo.
Otro sector en el que se nota que llega el día de Todos los Santos es en las floristerías. Crisantemos, margaritas y claveles son las flores típicas de estas fechas, las que más se llevan al cementerio, aunque también se venden estos días rosas e, incluso, orquídeas y otras clases de flores, aunque en menor medida. Sin olvidar el lado más dulce de la fiesta: no pueden faltar los buñuelos de viento y los huesos de santo, que en Jaca siguen siendo una tradición y que se muestran ya en los escaparates de las pastelerías.
También en la Plaza de la Catedral la venta de flores era importante este viernes, cuando numerosos jacetanos se desplazan al cementerio para limpiar las tumbas y los nichos de sus familiares fallecidos, con el fin de adecentarlos para el Día de los Difuntos.
En este sentido, y para facilitar las visitas al camposanto, el horario se ha ampliado durante estos días. Hasta el próximo día 31, el cementerio tendrá abiertas sus puertas al mediodía, manteniendo el horario de apertura continuado desde las nueve de la mañana hasta las siete menos cuarto de la tarde. El 1 de noviembre, día festivo, el horario continuado será de nueve de la mañana (09.00 horas) a seis menos cuarto de la tarde (17.45 horas). A partir del día 2, la apertura del cementerio volverá a su horario habitual: de nueve de la mañana a una y cuarto del mediodía (09.00- 13.15 horas) y de tres de la tarde a seis menos cuarto (15.00-17.45 horas).
Por otra parte, la Policía Local ha puesto en marcha un dispositivo especial para dar respuesta a la afluencia de personas que se moverán por Jaca a partir de las próximas horas. La Policía mantendrá patrullas estáticas en las inmediaciones y en la puerta del cementerio para controlar las zonas de acceso. Los servicios de la Policía Local contarán con una patrulla estática fija, que se reforzará con otras en las horas punta o cuando se produzca mayor afluencia de viandantes y vehículos.
La función de estas patrullas que vigilarán el cementerio será, sobre todo, cuidar por la seguridad de los peatones, teniendo en cuenta que la entrada del camposanto se encuentra en la carretera nacional y que esos días se prevé una gran afluencia de vehículos que llegan a Jaca desde otros lugares de la geografía española, utilizando esa vía de acceso a la ciudad. Además, también se ocupará de la ordenación del tráfico, con el fin de evitar atascos cuando se produzcan aglomeraciones de vehículos. Se colocará también señalización eventual de límite de velocidad en las cercanías del cementerio, ha anunciado el Ayuntamiento.
Hay que recordar que a partir de mañana y hasta el día 1 de noviembre será gratuito el autobús urbano entre la parada de la Ciudadela y el cementerio.