por Pilar Usón Mur (RAPA Jaca)
Los jacetanos acabamos de pagar un año más un gravoso impuesto autonómico, el ICA (Impuesto de Contaminación de Aguas), que sucede al antiguo y no menos gravoso canon autonómico de saneamiento.
desde que se puso en marcha hace 15 años, jaca ha pagado más de 25 millones de euros en concepto de canon en ICA a las arcas del Instituto Aragonés del Agua, organismo creado en Zaragoza a mayor gloria de los intereses políticos de un grupo determinado. Más de 25 millones, sí. Más de lo que costó, por hacer una idea comparativa, el nuevo Palacio de Hielo. Con ese dinero, ahora tendríamos otro Palacio de Hielo, aunque no creo que fuese esa la ilusión de los jacetanos, pero, desde luego que un hospital en condiciones, sí.
¿Tenemos algo a cambio de ese enorme esfuerzo? Nada. Durante los últimos 15 años, el Instituto Aragonés del Agua se ha limitado a retornar a Jaca los gastos corrientes de la Depuradora de la ciudad, propiedad el Ayuntamiento. Unos 400.000 euros al año…total, seis millones.
El IAA ha hecho, con los 20 millones restantes que se ha levantado en Jaca, mangas y capirotes. Depurar, no ha depurado nada: la mayoría de nuestros 32 pueblos siguen sin las fastuosas depuradoras anunciadas y, lo que es más grave y escandaloso, el rio Aragón sigue convertido en una cloaca. En una cloaca, sí. Porque ni Astún, ni Candanchú, ni Canfranc, ni Villanúa ni Castiello disponen de depuradoras. El IAA las subastó y adjudicó -y ahí se quedó-, privatizándolas a 20 años vista, sin consentimiento de los ayuntamientos, y con el único objeto de que sus ciudadanos pagasen también el canon y el ICA, porque a las cifras de Jaca hay que sumar también todo lo recaudado en el valle donde, para colmo, los ciudadanos pagan religiosamente sin obtener ningún servicio a cambio.
Para terminar de poner la guinda, la Unión Europea, a través del Estado español, transfirió más de 140 millones de euros a Aragón para construir las depuradoras del Pirineo -por haber sido calificadas de interés general por motivos ambientales obvios- y el Gobierno de Aragón se los gastó en otras cosas… Conclusión: todos los habitantes del Pirineo tendríamos que tener ya todas las depuradoras funcionando con el dinero europeo que venía destinado a ello sin que nos hubiera costado un euro -ni un recibo de ICA- y sin tener que engañar a los ayuntamientos. Pero nada de nada. Esto es la gran estafa y seguramente el mayor escándalo de nuestra Administración autonómica en toda su andadura, que empieza ya a ser larga.
En esta semana celebramos el día 22 el Día Mundial del Agua y el domingo, día 26, la Red de Agua Pública Aragonesa (RAPA) ha convocado una manifestación en Zaragoza para desenmascarar la gran estafa y exigir al Gobierno la depuración -nunca mejor dicho- de responsabilidades y un cambio radical de modelo.
Exigimos que los impuestos de los ciudadanos sean retornados a los ciudadanos y que el IAA devuelva a los ayuntamientos de la Comarca de la Jacetania sus competencias en materia de depuración y toda la financiación derivada del antiguo canon y del actual ICA-la pasada, la presente y la futura-, para que puedan solucionar ya los problemas del río Aragón, que es tanto como decir de nuestra joya natural..
Desde RAPA Jaca llamamos a la Comarca, a los ayuntamientos y a los ciudadanos a secundar la movilización, pero sobre todo a tomar conciencia del engaño del que hemos sido víctimas con tanta charlatanería durante tantos años en que en este tema del agua nos han distraído con problemas accesorios cuando nos estaban levantando la cartera…
