El próximo sábado, 11 de octubre, Ansó y el Valle del Roncal se darán cita en una nueva edición de la Junta de San Miguel. Como ya es costumbre, ambos territorios vecinos se encontrarán en la ermita de Puyeta, a escasos kilómetros de la localidad ansotana.
El primer archivo en referencia a esta junta data de 1612, por lo que se trata de una larga y extensa tradición a lo largo de la historia. Tras más de un siglo en el olvido, en 2006 se recuperó, pero no fue hasta 2022 cuando se reafirmó como un ejemplo de unión entre Ansó y el Roncal.
«Es un acto de hermanamiento con nuestros vecinos roncaleses. Con una parte institucional y otra más social. En esta última todos los vecinos pueden participar y disfrutar de una jornada muy divertida», explica Blanca Alfonso, alcaldesa ansotana.
La Junta de San Miguel, una forma de estrechar lazos entre Ansó y el Valle del Roncal
Este sábado, 11 de octubre, se desarrollará una cita muy especial para Ansó y el Valle del Roncal: la Junta de San Miguel. Un acto que alberga la ermita de Puyeta, cuyos primeros archivos encontrados son del 1612. Pese dejarse de celebrar en la primera mitad del siglo XVII, se recuperó en 2006, aunque no se reafirmó hasta 2022.
Desde hace tres años, tiene continuidad y se celebra de forma anual con la llegada del otoño, tal y como se exponía en los antiguos documentos.
«Es un acto que sirve, año a año, para estrechar la convivencia con nuestros vecinos roncaleses. La acogida año a año es mayor», sostiene Blanca Alfonso.
La Junta de San Miguel: una parte institucional y otra más social
Pese a ser un día de celebración, la Junta de San Miguel sigue manteniendo también su parte institucional. De hecho, es la parte con la que se comienza la jornada.
Hasta la ermita de Puyeta acuden, año tras año, representantes de ambas partes implicadas para establecer una mesa de trabajo conjunta. «Es la parte más seria del día, además de una celebración también se sacan conclusiones institucionales», destaca la edil de Ansó.
En esta edición, los representantes de Ansó y del Valle de Roncal tratarán diversos temas candentes. Se hablará de la situación del oso y su seguimiento, temática muy importante en la historia de ambos lugares, así como de la visita técnica de la pista de Armentadoia, que comunica ambos.
Dicha reunión se cerrará con la puesta en común de las actividades que se tienen previstas para la conmemoración del famoso Tributo de las Tres Vacas en Ansó, que este año se celebrará el próximo 16 de octubre.
Tal y como manda la tradición, cabe destacar que a esta mesa redonda los representantes acuden ataviados con la indumentaria propia de su territorio.
Una fiesta para todo el mundo tras la reunión
Tras terminar el acto institucional, todas las personas se dan cita en las proximidades de la ermita de Puyeta para degustar una comida tradicional a base de migas de pastor, caldereta de cordero y melocotón con vino. «Compartimos comida todos los presentes en un paraje especial, es otra forma de sellar nuestros ‘acuerdos’ con el Roncal un año más», sostiene Blanca Alfonso.
Posterior a ella, se baja al pueblo de Ansó para continuar con la celebración de la jornada. «Con un grupo del Roncal, que pone la música, se lleva a cabo una ronda de bar en bar por las calles del pueblo», alega.
«El día de la Junta de San Miguel es un momento para estar felices y conmemorar la ‘unión’ con nuestros vecinos», sentencia.
Por Jorge Callau
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