El proyecto BioPirineo ha analizado y puesto en marcha actuaciones piloto en gestión forestal y ganadera, diversificación agrícola y turismo sostenible, con el objetivo de recuperar el equilibrio del paisaje, mejorar la resiliencia frente al cambio climático y generar nuevas oportunidades económicas ligadas a los recursos locales. Hoy se han presentado en Jaca los resultados finales de sus acciones en los Valles Occidentales.

El proyecto BioPirineo ha presentado hoy en Jaca los resultados finales de sus actuaciones en los Valles Occidentales
El proyecto BioPirineo ha presentado hoy en Jaca los resultados finales de sus actuaciones en los Valles Occidentales. Allí se ponía de relieve la necesidad de avanzar hacia una gestión forestal coordinada y supramunicipal que permita afrontar retos como el riesgo de incendios, el crecimiento descontrolado de la vegetación, el relevo generacional y la adaptación al cambio climático.
La jornada ha comenzado con la intervención de la presidenta de la Comarca de la Jacetania, Olvido Moratinos. Agradecía que el territorio haya sido elegido para el desarrollo del proyecto: «Gracias BioPirineo por habernos elegido con este proyecto que esperemos se pueda replicar a otras zonas de la Comarca». Moratinos ha subrayado además la importancia de la gestión forestal sostenible como herramienta clave para la prevención de incendios: “Este año no hemos tenido ningún incendio, pero es un riesgo del que no estamos exentos”.
El coordinador del proyecto, Pablo Pevidal, ha sido el encargado de presentar las zonas de actuación de BioPirineo y los principales resultados obtenidos en materia de gestión forestal. Durante su intervención ha insistido en que «es necesario una figura técnica supramunicipal que ayude a todos los municipios a realizar su gestión forestal». Una demanda compartida por buena parte de los agentes del territorio.
“Solo se aprovecha el 10% de la masa forestal de Aragón”, ha añadido.
Dificultades administrativas en torno a Biopirieno
Desde el Instituto Pirenaico de Ecología y Desarrollo (IPE), Daniel Gómez ha explicado las dificultades administrativas encontradas durante el desarrollo del proyecto. “El problema no era económico. Hemos tardado 18 meses solo en conseguir los permisos necesarios para poder hacer una ordenación de pastos”. Gómez ha destacado también el conocimiento tradicional de los habitantes del territorio: “Los pueblos que viven en el monte saben que hay que doblegar la vegetación para frenar ese crecimiento descontrolado”.
Por su parte, Víctor Ezquerra, técnico del IPE, ha señalado que “El reto ha sido encontrar un equilibrio. Recuperar las especies autóctonas perdidas por el crecimiento de algunas plantas como el enebro”. Desde el IPE se ha explicado el plan de ordenación ganadera desarrollado en el marco de BioPirineo. Una hoja de ruta que incluye la delimitación de la unidad administrativa denominada «Puerto de Montaña» y la evaluación de la carga ganadera actual.
En el ámbito agrícola, Juliana Navarro, técnica del CITA, ha detallado los trabajos realizados para diversificar los usos del suelo y responder a la falta de superficie agrícola. «Queríamos dar una respuesta a la falta de espacio que hay para la agricultura, estaba todo dedicado al pasto». Navarro ha añadido que “teníamos que adaptar esos cultivos a escenarios futuros de cambio climático”. El objetivo era “evaluar el potencial del cultivo de frutales locales conservados en parcelas existentes del CITA”.
Plantas aromáticas de Bernués
Además, en la parcela de demostración de Bernués se ha podido demostrar el potencial de la zona para el cultivo y la recolección de plantas aromáticas autóctonas, abriendo nuevas oportunidades ligadas a la economía local y a la valorización de los recursos del territorio.
El proyecto también ha abordado la dimensión turística desde una perspectiva sostenible. Desde Ecounión se ha planteado la necesidad de impulsar una gestión y promoción turística unificada y coordinada del destino Valles Occidentales, mediante la organización de una mesa de trabajo público-privada, la creación de un consorcio, el desarrollo de un plan de financiación de acciones y la creación de una marca común con acciones de promoción.
El director de Ecounión, Jeremie Fosse, ha destacado la importancia de la movilidad para avanzar hacia un modelo turístico sostenible: “También hemos creado un plan de movilidad si queremos tener un turismo sostenible y desestacionalizado necesitamos tener ese plan de movilidad tanto para los turistas como para los trabajadores”.
Un auténtico Pirineo
Durante la jornada también se ha presentado la campaña de turismo sostenible Auténtico Pirineo, desarrollada por la agencia Lemur Creativos. La campaña pone en valor la identidad del territorio a través de sus propios habitantes, convertidos en “auténticos influencers”, reforzando un relato basado en la autenticidad, la sostenibilidad y el arraigo local.
Finalmente, se han dado a conocer algunas de las líneas de trabajo en las que se está avanzando para dar continuidad a los resultados del proyecto, vinculadas al desarrollo de productos locales, como cosmética de origen natural o licores artesanos, que podrían contribuir a fijar población y generar nuevas oportunidades económicas en los Valles Occidentales.
BioPirineo es un programa desarrollado con el apoyo de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.
ÚLTIMAS NOTICIAS:
- Viernes de cocido en Ultramarinos Jaca
- Jaca Jacobea despide el año con Bordón para Manu Bueno y belén peregrino en Torrijos
- BioPirineo reivindica en Jaca una figura supramunicipal para la gestión forestal de los Valles Occidentales
- Goteras, hongos y falta de accesibilidad: los docentes denuncian la situación del IES Domingo Miral de Jaca
- El Jacetano se reencuentra con la victoria