El Instituto de Estudios Altoaragoneses cumple 75 años con el objetivo de seguir trabajando por la cultura y el patrimonio de la provincia de Huesca. En ese contexto, prepara para el próximo año una programación especial para poner en valor el Monasterio de San Juan de la Peña coincidiendo con el aniversario de su incendio, en 1675, y la construcción del cenobio alto, que concluyó en el siglo XVIII. Antes, este lunes, tendrá lugar la gala que pondrá el broche de oro al 75º aniversario.
El Instituto de Estudios Altoaragoneses es un referente en la investigación, la conservación y la divulgación de la cultura, la historia y el patrimonio de la provincia de Huesca
El Instituto de Estudios Altoaragoneses es un referente consolidado en la investigación, la conservación y la divulgación de la cultura, la historia y el patrimonio de la provincia de Huesca. Una labor que este centro viene desarrollando desde su creación, hace justo 75 años, y un compromiso con el territorio que se fortalece, más aún si cabe, coincidiendo con su aniversario.
«Es un privilegio que Huesca tenga un centro de referencia para la cultura material en inmaterial, natural y para la ciencia en general. No podemos olvidarnos de que todo lo que se produce en el instituto, tanto publicaciones como distintas actividades, como congresos o jornadas, versan sobre cuestiones relacionadas con todo el territorio, y siempre se intenta valorar y tener en cuenta todos los aspectos de las diferentes comarcas que se enmarcan en la provincia», asegura la directora del Instituto de Estudios Altoaragoneses, Susana Villacampa.
Colaboración del Instituto con la Asociación Sancho Ramírez de Jaca
En este sentido, y dentro de la colaboración que el IEA mantiene con todas las diez comarcas de Huesca, el instituto coordina, impulsa y refuerza la labor de sus centros colaboradores.
Así, en el Alto Gállego, trabaja mano a mano con Amigos del Serrablo. En el caso de La Jacetania, el IEA mantiene una estrecha relación con la Asociación Sancho Ramírez, con una comunicación continua que favorece el éxito de las acciones que se proponen desde ambas entidades. De hecho, la directora del IEA arropó con su presencia la entrega de la última Bara Jaquesa, que el pasado verano recibían en la Ciudadela de Jaca Cristian Laglera y Manuel Gómez de Valenzuela.
Jornadas y publicación sobre San Juan de la Peña
En este marco de colaboración con las comarcas altoaragonesas, el Instituto de Estudios Altoaragoneses está organizando un importante evento cultural que tendrá como protagonista el Monasterio de San Juan de la Peña.
«Este mismo año van a tener lugar unas jornadas y vamos a realizar una publicación sobre el Monasterio de San Juan de la Peña«, explica Villacampa, con motivo del aniversario del incendio del monasterio bajo en 1675 y la construcción posterior del monasterio alto, en el siglo XVIII. Aunque todavía no hay fechas cerradas, el IEA tiene previsto realizar estas acciones «antes del verano».
«Tendremos varios ponentes, que nos darán a conocer la historia del monasterio; la destrucción que sufrió durante el incendio, y cómo después se reconstruye. Y también nos hablarán de la documentación que se conserva sobre San Juan de la Peña», avanza la directora del IEA. Y es que, como recuerda Villacampa, toda la actividad del instituto «es de ámbito totalmente provincial».
El Instituto de Estudios Altoaragoneses (IEA) ha sido un pilar fundamental en la investigación y divulgación de la cultura y recursos de la provincia de Huesca durante los últimos 75 años. Fundado como Instituto de Estudios Oscenses y vinculado al CSIC, su legado incluye la creación de la Cátedra Lastanosa y la publicación de la revista Argensola.
Democratizar la cultura desde el Instituto de Estudios Altoaragoneses
La directora del Instituto de Estudios Altoaragoneses destaca que los retos futuros del IEA pasan por «continuar con la labor de difusión, promoción, de publicación… sin rupturas, como se ha hecho hasta ahora. Y, dentro de lo posible, darlo a conocer a la sociedad».
«A veces se piensa que el instituto está dirigido a estudiosos, investigadores o eruditos; pero todo el mundo debe saber que hay una serie de servicios que, sin ser un experto, se pueden utilizar. Por ejemplo, el Fichero Bibliográfico Altoaragonés, donde hay bibliografía con artículos, incluso, íntegros, que pueden ser descargados; la web SIPCA, de información y catalogación de patrimonio aragonés, donde casi se puede viajar por los monumentos y las muestras de patrimonio material, inmaterial y de oralidad que están colgadas en ese portal… todos estos servicios están a disposición de la sociedad«, recuerda Susana Villacampa.
Se trata, en definitiva, y como explica su directora, de «democratizar» el acceso a esos fondos, «entendiendo que el instituto es un espacio cultural, plural, diverso y universal, lo que de alguna manera lo que hace es reafirmar nuestra propia identidad como grupo social». Y con ello, reforzar la historia, la cultura y la tradición del Alto Aragón.
Si te apasiona la historia del Alto Aragón, buscas iniciar una investigación, disponer de información sobre un monumento aragonés, programar una visita cultural, descubrir el origen de tu apellido o el porqué del nombre tu pueblo, o simplemente deseas explorar un periódico antiguo, el IEA es tu aliado perfecto.
Poner en valor el patrimonio de toda la provincia de Huesca
En este sentido, la directora de IEA considera que «sí somos conscientes del valor del patrimonio de nuestra provincia», aunque «no lo sabemos vender». Villacampa, no obstante, pone en valor la labor que realizan, desde hace años, «buenos investigadores, dentro y fuera de Aragón», que han profundizado mucho en ello. Una tarea que ha servido para dar a conocer «lugares tan emblemáticos como el citado San Juan de la Peña o la Catedral de Jaca, pero también pequeños conjuntos y ermitas y obras de arte que tienen muchísimo valor y que poco a poco se les está dando el protagonismo que merecen con investigaciones rigurosas y profundas», añade.
Becas para seguir apoyando la cultura
Es ésta, como apunta Villacampa, otra de las facetas del instituto: «Proporcionar becas a la investigación precisamente para que toda esa cultura, que a lo mejor no tendría otros apoyos de otras instituciones académicas, se pueda difundir y estudiar gracias a estas ayudas tan específicas destinadas a lo que es el Alto Aragón». En la última edición de la convocatoria, alcanzaron los 50.000 euros.
Instituto de Estudios Altoaragoneses. (Fotos: Verónica Lacasa)
Desde los años 70 y 80, y bajo el nombre de Instituto de Estudios Altoaragoneses, el IEA ha trabajado incansablemente junto a la Diputación Provincial de Huesca para consolidar su papel. Su sede actual en la Calle del Parque de la capital oscense desde 1987, ha sido testigo del crecimiento de su biblioteca, ahora con 70.000 volúmenes, y del desarrollo de múltiples actividades como reuniones científicas, exposiciones, encuentros literarios y ciclos de conferencias. La labor editorial del IEA es especialmente notable, superando el millar de títulos, la mayoría accesibles en su web.
Este lunes, 16 de diciembre, la Diputación Provincial de Huesca pondrá el broche de oro a la celebración del 75º aniversario del Instituto de Estudios Altoaragoneses. Lo hará con una gala que pretende convertirse en un guiño a la historia del que se ha consolidado, por méritos propios, en un referente en la defensa del patrimonio material e inmaterial de la provincia.
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Por Rebeca Ruiz
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