El Zarauz está de aniversario. Mítico bar de Jaca que marcó los mejores momentos de muchos jacetanos desde que abriera sus puertas en los 90, este 2025 se cumple una década desde que Fernando Dieste ‘Puchi‘ y Pablo Luque -después, también junto a Stanislav Soyanov ‘Stivi– tomaran las riendas del emblemático establecimiento. Lo hacían como parte de un proyecto que se completaría unos años después con el Ultramarinos, el restaurante con el que comparte plaza: la Plaza del Pilar. O como se conoce en la ciudad, la plaza del Zarauz. Un nombre con alma, Zarauz Snow Bar. Y mucho más que un local emblemático, cuya trayectoria va inseparablemente unida a algo que la hace única: la familia del Zarauz.
Hace diez años, Fernando Dieste ‘Puchi‘ y Pablo Luque tomaban las riendas del Zarauz
Hace diez años, Fernando Dieste ‘Puchi‘ y Pablo Luque tomaban las riendas del Zarauz. Más de cuatro décadas han pasado desde que este mítico establecimiento abriera sus puertas en Jaca. Pocos hay que no hayan oído hablar del Zarauz. Y muchos los que lo recuerdan como un pionero de la hostelería jacetana en la década de los 90.
En junio de 2015, Luque y Dieste -posteriormente llegaría Stanislav Soyanov ‘Stivi’- se ponían al frente del Zarauz. Lo hacían con un proyecto que se ampliaría en noviembre de 2018, cuando asumieron también la gestión del Ultramarinos, con el que el Zarauz comparte plaza. La plaza del Pilar. O mejor, la plaza del Zarauz, como todo el mundo la conoce en la ciudad. Los dos habían trabajado de jóvenes en el Zarauz y guardaban muy buenos recuerdos… así que más allá de un proyecto empresarial, para ellos tenía un componente sentimental importante. Tres jacetanos, Pablo, Puchi y Stivi, con tres caminos dispares que volvían a cruzarse en Jaca en torno al Zarauz Snow Bar. Un auténtico referente de la hostelería jacetana.
Así comenzó la aventura de la última etapa del Zarauz
Puchi recuerda como si fuera ayer cómo comenzó la gran aventura del Zarauz en su última etapa. «Yo en esa época trabajaba en ‘El café’. Era un viernes de mayo y yo vine a pedirles una caja de Kas de Naranja. En ese momento me enteré de que lo cerraban. Llamé a Pablo y le propuse cogerlo. Lo apalabramos y lo reabrimos en junio», explica Dieste. Al principio lo compaginaron con otros proyectos, hasta que el pequeño les exigió toda la atención.
Más de cuarenta años de historia dan para mucho. «Desde el principio quisimos recuperar la esencia del Zarauz de los 90 que conocimos como clientes, al que íbamos a disfrutar del ambiente, de la buena música y de las novedades. Fue en aquella época en la que en el Zarauz se pasó a usar el vaso ancho en lugar del tubo, se sustituyó la rodaja de fruta en la bebida por los ‘twists’, se introdujeron las primeras cervezas de importación, se empezaron a preparar cócteles y unos mojitos espectaculares, y fue entonces cuando nacieron los marianitos, ese chupito que no dejaba indiferente a nadie, y que nosotros hemos querido recuperar (…) Después, el Zarauz dio un giro hacia la noche, pero manteniendo siempre la calidad, con DJs en sus fiestas temática y con los mojitos de diferentes sabores y copas bien elaboradas como tarjeta de presentación».
Lo mejor de cada época: la auténtica esencia del Zarauz
Cuando Pablo y Puchi se pusieron al frente del nuevo Zarauz quisieron recuperar lo mejor de cada época para fusionarlo en lo que hoy sigue siendo una propuesta única, diferente y de calidad. Innovadora, siempre, pero con toda la esencia del auténtico Zarauz original. Todo, para que el cliente -más que amigo, ya; de hecho, ellos hablan de «la familia» del Zarauz- siempre encuentre razones para volver al Zarauz Snow Bar. Como ellos dicen, «ese pequeño rincón de Jaca que quiere seguir siendo un referente en el Pirineo».
Unos años más tarde se sumaría Stivi al proyecto. La casualidad quiso que fuera, de nuevo, un mes de junio. Excelente Dj y mejor coctelero, encaja a la perfección en la filosofía del Zarauz. «Dimos un giro al Zarauz. Fue un poco locura. Quitamos la cafetera y el grifo de cerveza. Nos conocían, hasta entonces, porque hacíamos ingeniería jacetana, que era tener vasitos con agua y hielo -no el vaso congelado, que es lo peor que puedes hacer- para ofrecer lo mejor. Tardábamos en hacer la cerveza una eternidad», explica Puchi.

La pandemia y las dificultades para encontrar personal cualificado obligaron a los responsables del Zarauz a dar un giro al proyecto. Fue una época muy difícil. La normativa contracovid impedía trabajar y era imposible mantenerlo abierto.
Pero como señala Puchi, «pudo el corazón». Y es que sobra decir que el Zarauz es mucho más que un local de moda -que va camino de medio siglo ya manteniéndose en el ojo del huracán-. Fue gracias al Ultramarinos y al esfuerzo personal -y casi, irracional- de Dieste y Luque lo supuso que el Zarauz, todo un clásico por méritos propios, se reinventara y sobreviviera a la etapa más complicada de su historia.
La llegada de Stivi y La plazita sessions
Con la la entrada en escena de Stivi -otro chico Zarauz que, además, formaba parte del equipo del Ultramarinos- y la incorporación de La plazita sessions el Zarauz Snow Bar se reinventaba, hace tres años, con RdeRumba. Una propuesta diferente para los findes jacetanos que sorprendió y gustó desde el minuto uno. Hasta hoy. La última entrega, con DJ Hazhe, resultaba todo un éxito y para el Primer Viernes de Mayo ya se está preparando una nueva sorpresa.
La música es la gran protagonista del Zarauz, donde no se pincha nada comercial. «Somos el único local que pone música diferente al resto y, posiblemente, servimos las mejores copas de Jaca», señala Puchi. Pero, sin duda, el secreto del éxito, está en el trato y en las relaciones. «Aquí siempre se te va a respetar. No hace falta saber quién eres, ni de dónde vienes. No juzgamos. Siempre vas a encontrar un buen ambiente basado en el respeto y en tratar a nuestros amigos, tanto si son de Jaca como si vienen de fuera, de la misma manera que a nosotros nos gustaría que nos trataran», añade.
«Cuando llegas al Zarauz somos todos iguales. Fuera, cada uno tiene su vida. Ni siquiera hace falta que seamos de la misma cuadradilla, o de la misma edad. Cuando llegas aquí, todos somos la familia del Zarauz», asegura Stivi. Y es que el Zarauz es mucho más que un local de moda en Jaca. El Zarauz se ha convertido, por méritos propios, en todo un referente de la hostelería del Pirineo.
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Por Rebeca Ruiz
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